MUELLE

Los muelles tienen un principio y un final bien definidos y parece ser que eso no lo pueden cambiar aunque quisieran.
La vida del muelle consiste en contraerse y elongarse, se contraen cuando algún peso les cae encima y se elongan intentando recuperar la posición original cuando se sienten libres.Pero la historia no queda ahí, algunos muelles han conseguido liberarse de sus ataduras y sumar nuevos movimientos, algunos muelles rotan sobre sí mismos. Estos, los más aventureros, recorrieron lugares y allá por donde pasaron se hicieron preguntas.
Aunque se contraigan, aunque se elongen, los muelles siempre tienen el mismo material, aunque giren sobre sí toda la vida seguirán teniendo el mismo principio y el mismo final.Intentando responder a sus preguntas, aquellos que sumaron movimientos comenzaron por convencer a sus semejantes rompiendo la idea lineal del tiempo, diciendo que la existencia no consiste en seguir la misma línea de existencia, subiendo y bajando de por vida, para acabar quemado en algún vertedero.
Los muelles tradicionales, al verse atacados, defendieron su sistema de vida y contratacaron contra el sistema cíclico de los muelles movedizos, dijeron que el ciclo tiene también un principio y un final que no puedes eludir y aunque reconocieron que en el ciclo fomenta el movimiento, este no les llevaría a ningún lado, no progresarían ni se harían más grandes.

Ante la falta de sentido de sus vidas un nuevo movimiento está surgiendo, algunos muelles movedizos marcharon diciendo que la vida en sí es una vuelta, un ciclo, pero vivir ese ciclo consiste en hacer de tu vida muchos ciclos, una espiral, en aprender vuelta por vuelta y dejar que esa vuelta a su vez te ayude a girar en el gran ciclo.Estos muelles marcharon sin intentar convencer de su teoría, algunos les acusaron de cobardes, de no cambiar las cosas, otros simplemente saben, que algún día estarán de vuelta.