Punto.
El punto se encontró en esa hoja, inmóvil.
Pensaba que siempre estaría allí, que todo él empezaba y acababa en esa minúscula circunferencia, y aburrido de mirar la página desde la distancia buscó dentro suya y se descubrió en un tubo que velozmente le llevó hasta otra parte.
De nuevo se encontró allí, siendo punto en otro lugar de la hoja, sin saber si sería la misma u otra diferente, pero intrigado por aquel viaje interior, proponiéndose viajar de nuevo por su tubo y fijarse con esfuerzo en el camino recorrido.
Descubrió que su tubo era como un hilo que bordaba la página en blanco escribiendo letras, palabras, historias, pero que después del bello tejido volvía a aparecer y paraba la historia.
Y pensó que las historias tienen siempre un final, y sería allí donde él y su vida acabarían, pensó.
Temeroso del final de su existencia y llevado por la ilusión de recorrerse siempre a sí mismo en busca de más historias, para no acabar con la fantasía que dentro tenía, se deslizó por el tubo y nunca volvió a salir
El punto se encontró en esa hoja, inmóvil.
Pensaba que siempre estaría allí, que todo él empezaba y acababa en esa minúscula circunferencia, y aburrido de mirar la página desde la distancia buscó dentro suya y se descubrió en un tubo que velozmente le llevó hasta otra parte.
De nuevo se encontró allí, siendo punto en otro lugar de la hoja, sin saber si sería la misma u otra diferente, pero intrigado por aquel viaje interior, proponiéndose viajar de nuevo por su tubo y fijarse con esfuerzo en el camino recorrido.
Descubrió que su tubo era como un hilo que bordaba la página en blanco escribiendo letras, palabras, historias, pero que después del bello tejido volvía a aparecer y paraba la historia.
Y pensó que las historias tienen siempre un final, y sería allí donde él y su vida acabarían, pensó.
Temeroso del final de su existencia y llevado por la ilusión de recorrerse siempre a sí mismo en busca de más historias, para no acabar con la fantasía que dentro tenía, se deslizó por el tubo y nunca volvió a salir